Marcelino Menéndez Pelayo, pensador español.
"Si no es seguro que (san
Francisco) hiciese versos... fue a lo menos soberano
poeta en todos los actos de su vida y en aquel simpático
y penetrante amor suyo a la naturaleza"
Emilio Castelar, republicano liberal
español.
"El sepulcro de san Francisco...
es uno de los núcleos donde se han condensado la materia
cósmica de las ideas y se ha ido formando este cometa de
origen divino y de órbita incalculable que se llama el
humano espíritu".
Leopoldo Alas Clarín, escritor.
"Francisco de Asís eternamente de
moda. La frase evangélica: Siempre habrá pobres entre
vosotros, explicada no por la miseria material, no por
el egoísmo que acapara, sino por la constante imitación
de San Francisco".
Miguel de Unamuno, pensador español.
"San Francisco de Asís o Buda
sobre un costal a la luz de la luna representan un grado
de civilización mucho más alto que el de unos cuantos
caballeretes en casas aireadas y soleadas, bien
vestidos, bien calzados, alumbrados de luz eléctrica,
etc. etc."
Miguel de Unamuno, pensador español.
"El símbolo religioso italiano son
los estigmas de Francisco, señales de crucifixión por
redimir a sus prójimos".
José Martínez Ruíz, "Azorín", escritor.
"Estos franciscanos son gente
sencilla, modesta, amante de las cosas del campo.
Hablamos de las cosechas, de las frutas, de las flores,
de los sembrados, de los pájaros, que tan amigos eran de
San Francisco".
Ramón del Valle Inclán, dramaturgo.
"El pobrecito de Asís, con total
olvido de las razones egoístas y carnales nos enseña el
amor inocente, igual por la oruga que por la estrella.
Ama las cosas no por lo que son para nuestros fines,
sino por aquella razón de conciencia que a todas las
hace ser distintas y buenas".
Jacinto Benavente, dramaturgo.
"Francisco de Asís, loquillo del
Cielo, cantando, saltando, jugando, como van los chicos
sueltos de la escuela, así fuiste tú a Dios, haciendo
novillos de iglesia y doctrina".
Luis Rosales, poeta
"San Francisco es el poeta de las
criaturas y del hombre desvalido. Su amor a los seres,
incluso a los más mínimos, vistos todos en un plano de
igualdad, se produce no como un acto panteísta, sino
como resultado de ver en cada criatura una prueba, un
reflejo del poder divino".
José María Pemán, escritor.
"Volaban de los troncos a las flores. /
Cantaban y reían en mis manos. / Yo iba a decir con San
Francisco: ¡Hermanos!... / ¿Pero tienen hermanos
pecadores los pájaros?"
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